En Veracruz están ocurriendo muchas cosas raras, verdades a medias y mentiras de muy mala leche, que llaman a la sospecha de los malpensados.
Si usted revisa los medios, puede llegar fácilmente a la conclusión que de la noche a la mañana, el estado se ha puesto a competir con Ciudad Juárez, con Monterrey y con Cuernavaca, a la que el ingenio mexicano conoce ya como la “ciudad de la eterna balacera”, por hechos de inseguridad que se han potenciado mediáticamente en los últimos días…conforme se acerca el 4 de julio.
Primero asesinan a los padres de un candidato panista en Las Minas, luego asaltan y matan a una pareja de empresarios en Xalapa y ayer, el equipo de campaña de Miguel Ángel Yunes denuncia que colaboradores cercanos al ex director del ISSSTE fueron golpeados.
Pareciera que la realidad ya es tormentosa para los veracruzanos en materia de inseguridad, como lo es por ejemplo, para los juarenses. Y claro, el PAN se monta en esos hechos de violencia, mandando correos y organizando foros y marchas de rechazo a la violencia y culpando de ella, claro, a Fidel Herrera y al PRI.
Pero sin desestimar los hechos concretos que son a toda luces reprobable, llama la atención la denuncia panista porque, según el boletín de la dirigencia estatal del PAN, la agresión contra colaboradores de Yunes ocurrió en el lobby de un hotel que no identifica y lo peor y en realidad poco creíble, que los agresores se identificaron como Zetas.
Ahí es donde no cuadra la versión del dirigente Enrique Cambranis Torres, porque según su dicho, los Zetas agredieron al jefe de avanzada de los yunistas, Lorenzo Hermida, diciéndole textualmente, dice el comunicado blanquiazul, “que se salieran de Veracruz pues la única campaña es la campaña del PRI y no hay otra”.
Vaya favor que le estaría haciendo la delincuencia organizada a los panistas: ponerlos como víctimas, amenazarlos y mostrarse como aliados del PRI. Demasiado bueno para la campaña del PAN, como para ser verdad.
Por la tarde, la versión de la agresión quedó sólo en lo que alguna mente perversa quiso: el rumor de que los Zetas no quieren que gane Yunes, para que Calderón no tenga un soldado más en su guerra contra el narco. Y para asociar en el inconsciente colectivo: PRI es igual a inseguridad.
Visto así las cosas, pareciera que en el PAN se impulsa una estrategia de campaña negra, como lo demuestran correos y videos que divulgan como si hubieran sido en antros jarochos, las masacres del narco perpetradas contra jóvenes en otras ciudades del país. Justo lo que decía Yunes que le estaba organizando en su contra, el PRI.
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